El piano es un magnífico y delicado instrumento musical que debe ser movilizado con mucho cuidado ya que pudiese estropearse durante su traslado, por esta razón, a continuación te explicaremos todo lo que debes saber para mover un piano de forma segura.
Para realizar este tipo de trabajo es recomendable que contrate a una empresa especializada, sin embargo, también podrá hacerlo por usted mismo cumpliendo con todas las medidas necesarias para tal fin.
Consiga ayuda
Si ha decido mover el piano por su cuenta, sin utilizar los servicios de profesionales, es importante que le pida ayuda a un familiar o amigo ya que los pianos son bastante pesados, voluminosos, frágiles e incómodos de transportar. Asegúrese de contar con manos extras que le faciliten la tarea.
Utilice el equipo apropiado
Para movilizar un piano con seguridad debe tener a mano el equipo apropiado, con esto nos referimos a cuerdas o correas resistentes que le permitan tener una buena sujeción del mismo, ya sea para su traslado o sujeción dentro del camión de mudanza. Además de esto, tendrá que localizar una plataforma con ruedas que soporte todo el peso del instrumento.
Así mismo, es importante que utilice sábanas, mantas o algún otro elemento acolchado con el cual cubrir el piano, ya que es posible que durante su traslado pueda tropezar, recibir golpes y rayarse.
Por otra parte, si no está muy seguro del tipo de plataforma rodante a utilizar, puede contactar a una empresa de mudanzas que seguramente ellos le suministrarán esa información, e incluso lo podrán ayudar con el alquiler de las herramientas necesarias.
Asegure el teclado
El teclado de un piano es un área delicada que debe ser tratada con cuidado, por esta razón cierre y bloquee la tapa del teclado para evitar que se abra durante la movilización y de esta forma protegerla. Ahora bien, si la tapa de su piano no permite su bloqueo, no trate de colocar cinta para pegarla, ya que pudiese estropear la superficie de la misma.
Cubra el piano por completo
Una vez asegurada la tapa del teclado, utilices unas mantas acolchadas, para envolver por completo el piano, prestando atención a que las esquinas queden bien cubiertas, luego de esto utilice cinta de embalar para sujetar las mantas.
Levante el piano
Luego de cubrir y proteger el piano, ha llegado el momento de levantarlo, en este punto es importante que no lo haga por las patas, ya que la unión de estas con el resto del instrumento se puede romper. Así mismo, es recomendable mantener la verticalidad del piano, ya que su mecánica es bastante compleja y puede estropearse al colocarlo en otra posición.
Para levantar el piano deberá pedir ayuda a un familiar o amigo ya que este instrumento pesa mucho, en este punto es preferible que lo hagan al menos entre cuatro personas, de esta manera tendrán más fuerza y equilibrio para transportar el instrumento.
Subir el piano al camión de mudanza
Por lo general, el piano es una de las primeras cosas que se suben al camión de mudanza, y cuando se hace se toman todas las medidas para asegurar que el mismo no se mueva o tambalee durante el traslado a su nuevo destino, para ello se utilizan las cuerdas o correas y se sujeta con firmeza a las paredes del camión.
Por otra parte, para levantar el piano e introducirlo al camión deberá utilizar un montacargas manual o eléctrico. Este punto no debería ser un inconveniente, ya que la mayoría de las veces las empresas de mudanzas tienen los equipos necesarios para levantar cargas pesadas.
Verifique el nuevo lugar del piano
Antes de transportar su piano al nuevo destino, es necesario verificar el lugar donde descansará, si va a estar contra una pared es importante que no le llegue el sol directo ya que podría estropearse la superficie del instrumento. Así mismo, es importante que verifique las entradas y los sitios por donde pasará el piano, para asegurarse que pueda pasar sin inconvenientes.
Instale y afine su piano
Como muchos instrumentos, el piano puede desafinarse con facilidad si es sometido a continuos movimientos, por esta razón, una vez que lo instale en el nuevo lugar, deberá proceder a contratar los servicios profesionales de un afinador, para devolverle su melodioso y característico sonido.