A la hora de comenzar una mudanza, es necesario colocar aparte los enseres más delicados para protegerlos de manera adecuada. En el caso de vajilla y objetos de cristal o porcelana, es conveniente envolverlos uno por uno con el material adecuado. Esta clase objetos frágiles requieren de un cuidado especial para no llevarnos sorpresas desagradables al abrir las cajas en el nuevo hogar.
Por nuestra amplia experiencia, desde Mudanzas y Guardamuebles Lidón ofrecemos una serie de consejos a la hora de realizar el embalaje de objetos delicados para una mudanza.
Cómo embalar enseres frágiles para la mudanza
En primer lugar, es recomendable embalarlos de uno en uno. Así evitaremos posibles golpes y fracturas durante el traslado. Individualizar las cajas también es importante para la protección y el orden. Se trata de no mezclar materiales para evitar roturas.
El plástico de burbujas es el mejor material para envolver cristal, loza o porcelana. Gracias a su acolchado, protege de manera eficiente vasos, tazas o copas. También el cartón es un material adecuado para platos y soperas. El papel de estraza evita rayaduras y puede servir como relleno de determinados objetos. Aunque resulta muy común utilizar papel de periódico, se debe llevar cuidado, porque al contacto con la humedad la tinta de las hojas puede dañar la superficie de vajilla delicada.
Una base de corcho o en las esquinas y paredes de las cajas protege el embalaje completo en la mudanza. Los objetos con superficies más resistentes como platos convienen colocarlos en el fondo de la caja.
Marcar de manera bien visible el contenido de las cajas para que sean trasladadas con cuidado.
Y, por último, confiar en una empresa profesional de mudanzas como Mudanzas y Guardamuebles Lidón. Garantizamos el máximo cuidado y protección de todos los enseres a la hora de realizar mudanzas.
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